Múltiples
expertos postulan que el tener un “cuerpo
alcalino” es símbolo de bienestar. Aquí te contamos como conseguirlo.
Ciertos
diarios, expertos y nutricionistas postula que el tener cuerpo alcalino es sinónimo
de salud y bienestar. Aquí te explicamos de que se trata este concepto y como
es que puedes incluirlo en tu vida.
UN
CUERPO ALCALINO
Esta
especie de corriente postula la origen de la salud está en nuestra. En concreto,
en el pH de la sangre, el índice que mide su acidez o alcalina en una escala
del 0 al 14.¿Cual es el nivel idóneo? El 7,4. Pero la contaminación ambiental,
los malos hábitos alimenticios o el estrés acidifican el cuerpo y alteran este
pH. Y la sangre reacciona, robando los nutrientes y minerales que necesita del
resto de órganos vitales para compensar el desequilibrio.
Tras
este “saqueo” de nutrientes el cuerpo experimenta una serie de efectos
negativos, según aseguran los nutricionistas. Estos problemas son por ejemplo
cansancio, dolores de cabeza, problemas digestivos, desmineralización de las
uñas y el cabello, entre otros. “Si pasa el tiempo y no se pone remedio, estos síntomas
se convierten en enfermedades como el cáncer”, asegura el experto.
CLAVES
PARA CONSEGUIR UN CUERPO SANO
La
idea es conseguir el equilibrio. Para ello uno debe consumir una dieta
balanceada, para así aportarle a la sangre los nutrientes que necesita.
Según
el nutricionista somos los que comemos, así que si quiere ser alcalino hay que
comer alcalino. El nutricionista afirma que lo ideal es “compensar con más
alimentos alcalinizables-ricos en potasio, magnesio y/o calcio- para que el
cuerpo no tenga que sufrir robando minerales para alcalinizar la sangre”. De este
modo lograremos equilibrar la cifra del pH.
Se
recomienda reducir el consumo de alimentos acidificantes y comer, en cambio,
mas alimentos alcalinizantes. Aquí una pequeña relación de algunos de los
productos que conforman cada uno de estos grupos.
Alimentos
ácidos : Café, alcohol, gaseosas, frituras, azúcar refinada, harina blanca,
jugo de frutas envasado, chocolate, mermelada, leche, arroz, carne roja, frutas
en general.
Alimentos
alcalinos: Papa, lechuga, pepino, col, espinacas, algas, limón, palta, ajo, té
verde, jengibre, almendras crudas.
Como
apreciamos en la tabla, “podemos encontrarnos con un alimento ácido como el limón
con un comportamiento alcalinizante una vez digerido, por su aporte mineral y
la sustancia de azucares”.
Depurar
los residuos tóxicos de nuestro cuerpo también es muy importante. Por ello se
recomienda tomar mucha agua y mantenerse hidratado. Cabe indicar que también se
aconseja hacer ejercicio físico y evitar el estrés.